miércoles, 27 de enero de 2016

... debí publicar esto el 6 de septiembre de 2015, pero no mucho ha cambiado de ese día hasta hoy...

Podría decir que ya ha pasado un tiempo desde que terminamos... 


En realidad son cerca de tres años en los cuales he tratado de despedirme y quizá en el intento de negar muchas cosas he ido tratando de acomodar mi vida poco a poco, y poco a poco ir sacándote de mi corazón, tratando de desprender un dolor que llevo  en el alma;  sin embargo debo reconocer que aun no lo logro y he comprendido hoy que sin lugar a dudas sigo creyendo que difícilmente se olvida lo que alguna vez te hizo feliz... desconozco como lo hayas hecho tu, como me gustaría saberlo; sin embargo lo que si se, es que ardes dentro de mi cada vez que intento olvidarte, cada vez que intento no pensarte pero inevitablemente aún me haces sonreír; me siento destrozada, y sin embargo sigo amándote y debo reconocer que estuve bien por un tiempo, pero sin pedirlo, los recuerdos se me vinieron encima, las promesas, los "te amo", los "siempre estaré contigo". Y bueno hay unos cuántos queriendo entrar a mi vida, pero debo sonreír y asegurar que tú los sigues derribando.

Reconozco que romper fue una de las peores cosas que podrían haber sucedido, porque ese día perdí... Perdí a la razón de mi alegría, a ese pilar de apoyo, pero sobre cualquier cosa; perdí a mi amor; por situaciones externas no dimensione todo lo que se me vendría en adelante. Trate de que no se notara la tremenda tristeza que sentía, pues definitivamente no estaba dispuesta a que se apoderara de mí y estaba segura de que eso era lo que iba a suceder.

Debo reconocer que te extrañé, que aun te extraño, pero traté y sigo en el intento de olvidarte; aun me siento absolutamente destrozada, pero de cierta forma estaba segura de que mi amor por ti se mantendría intacto a pesar de todo el dolor que sentí en ese momento. Estaba pasando por un trance complicado y no sabía ni tenia claro qué hacer, quería dejarlo todo, marcharme y desaparecer. Estaba convencida de que lo que quería era borrarte de mi vida y de mis pensamientos, pero era imposible, no podía, no pude. Y aunque debí decírtelo alguna vez,  debí decirte adiós, pero no pude o quizá; simplemente no quería hacerlo.

En definitiva debo admitir que te odié durante algunos instantes, pero sentía que había algo que no me permitía continuar con mi resentimiento. Sin embargo obtuve fuerza, sin siquiera saber de donde la sacaba, pues en ese momento tu imagen, en lugar de ir desvaneciéndose, se hacía más clara. Multiplicaba mis tareas y trataba de mantenerme ocupada para no pensar en ti nunca, sin embargo sentía que era simplemente imposible.

Quizá  te sorprenda saber todo esto o quizá no, pues tal vez a simple vista me veía tan fuerte y realizada, que quizá creíste que podía dejarte ir, que podía olvidarte. Pero la verdad no fue así.

Pero las cosas pasarán de la forma en la que tengan que ser; aun así quiero que veas que los culpables fuimos ambos...

-Se podría asegurar que en algunas ocasiones, existen personas que nos marcan o que simplemente no se pueden borrar. Algunas veces se evidencian verdades que marcan un antes y un después y que ahora mejoran las cosas, aunque se necesiten guardar.- 

Es ahora cuando te doy a conocer mi verdad, a pesar de todo hoy pude levantarme y sonreír. Aunque aun no sienta el valor para verte sonreír menos si no es aquí a mi lado... Pero hoy quiero que sepas que si por casualidad alguna vez llegases a extrañarme, deberías hacérmelo saber…

Quizá quieras hacerme saber de alguna manera que quieres volver a vivir ciertos momentos que  de cierta forma marcaron nuestra corta historia; si alguna vez me extrañas, ven, quizá podamos recordar esos instantes que  eran como una especie de alimento para mi alma para todo el día… podrías decirme acaso cómo olvidar cuando tu voz pronunciaba mi nombre…

 -Sonrió de solo recordarlo-


Sin embargo yo te puedo decir que las veces que he extrañado tu mirada, me he refugiado en aquellas conversaciones que solíamos tener, en aquellos días donde podía ver tu sonrisa y tus bellos ojos. Puedo decir, o quizá mas bien escribir que extraño tanto tus despedidas, y esas prolongadas ausencias, es increíble, como es posible que extrañe tanto aquellas bonitas conversaciones sobre lo que podías ser, aquellos instantes donde podíamos soñar juntos, viajar juntos, vivir juntos, y en cierta forma disfrutar el uno al otro.

Hoy debo reconocer que las veces que te he extrañado he intentado  no correr a ti; porque me siento segura de que ya me llevas contigo, aunque no este aquí, siempre me llevas en tu piel, desde aquel instante en el que adquirimos aquella unión donde no hubo papel ni pluma,  pero hubo una entrega totalmente pura y deseada por ambos que en cierta forma nos marco o que por lo menos me marco la vida aquel día que te quedaste aquí.

Es así que si alguna vez me has extrañado o si alguna vez llegas a extrañarme, sólo debes mirar al cielo y ver la luna, que yo al igual que tu  la estaré viendo y será lo más cerca que quizá podremos estar tú y yo; quizá hasta que sea nuestro momento...

... Pensando que quizá llegue nuestro momento; sin embargo siento que si no vuelves o no llega nuestro momento comprenderé que no estaba en los planes del Universo que tú fueras para mí, y que quizá nuestro futuro sea con otras personas, pero si en cambio si llegase ese momento para estar juntos nuevamente, prometo que las cosas serán diferentes. 

Podría segurar en este instante que durante este tiempo sin estar juntos he aprendido muchas cosas, la principal es que los dos nos equivocamos, podríamos estar juntos y sin embargo insistimos en seguir perdiendo muchas cosas bonitas, yo te amo pero no sé qué pase por tu mente ahora, sin embargo siento una especie de vació en el alma al escribir esto; pero es necesario; si de verdad sientes que ya no debemos estar juntos, que ya no me amas, que si me vieras no te pondrías nervioso, si así eres feliz, si piensas que otra persona podría hacerte sentir más que yo, y aunque me arda el alma no regreses; y debo escribir que si llegases a sentir lo contrario aquí estoy para ti, dispuesta a escucharte, a que luchemos juntos como alguna vez lo prometimos, ha estar juntos a pesar de la tormenta, ¿No podría creer que lo olvidaras?

Ya ha pasado mucho tiempo y evidentemente he contado cada día y la verdad me niego a aceptar que llegue ese momento en el que pienses que podíamos solucionar las cosas y ya sea muy tarde, siento que aún estamos a tiempo. Recuerda todas las cosas que nos unieron, todos los momentos difíciles que superamos juntos, recuerda que yo estuve para ti cuando lo necesitaste, quizá no de la forma que querías, quiero que también pienses en el como me sentía cuando ya no tenías tiempo para mí, yo sólo necesitaba un poco más de tiempo, más cuidados, más calor, sólo estaba esperando que regresara la persona de la cual me había enamorado y esos pequeños detalles e instante que hacían la diferencia.

Quizá no encontré una buena manera de expresarte como me sentía, sólo quería hacerte saber que necesitaba más de ti. "Siento que aun no estamos del todo rotos y pienso que podemos aprender a amarnos de nuevo". Si por alguna razón lo que definitivamente no te ayuda a volver es el orgullo por favor déjalo atrás, yo lo estoy haciendo porque te necesito, y no me quiero rendir; aun.

Hoy... Sólo quiero que sepas que siempre te voy a querer y que definitivamente te estoy esperando, - sonrió...- porque literalmente...  me he sentado a esperarte, y no estoy esperando que no lleguen por mí, pues es a ti a quien espero, quizá pueda hacerlo toda la vida pero no debo hacerlo, quiero que seas feliz, quiero recordarte siempre como el día que te conocí, sonriente, valiente, divertido, pienso en ese día... y estoy segura que desde ese primer día sabía que debíamos estar juntos, y han pasado tantas cosas, y en verdad quisiera que pasaran como en mi último sueño, donde charlábamos y nos reíamos de todas las tonterías que nos habían sucedido durante este tiempo sin estar juntos...

Te extraño evidentemente es así; lo hago cada día... seguramente lo seguiré haciendo...